Las lomas de Villa María, ubicada entre Villa María del Triunfo y La Molina, abarcan más de 6 millones de m2 y han sido declaradas un ecosistema frágil por el Ministerio de Agricultura, debido a su rica diversidad y a los servicios ecosistémicos que brindan.
Cálidda, en línea con su pilar de Acción por el Clima y su programa de biodiversidad, en el 2021 lanzó este proyecto emblemático de conservación, implementando tecnología de atrapanieblas. A la fecha, se han instalado 21 atrapanieblas, 10 de ellas financiadas por la compañía, lo que permite capturar 2,553 litros de agua diarios distribuidos a través de un sistema de riego tecnificado que abarca 22,000 m2 de terreno reforestado. Este esfuerzo ha resultado en la mitigación de 65 toneladas de CO2 equivalente, contribuyendo directamente a la restauración de un ecosistema clave.
El impacto social de este proyecto también ha sido clave. Ha capacitado a 253 personas en temas de biodiversidad y ha impulsado el ecoturismo en las lomas, con un incremento de visitantes que alcanzó 1,000 personas registradas. Esto ha sido complementado por actividades de voluntariado, donde más de 85 personas han colaborado en la instalación de postes de alumbrado solar, la creación de quioscos, pérgolas y murales, generando un entorno más seguro y atractivo para la comunidad.
Para el 2024, Cálidda se propuso incrementar la captación de agua en un 40%, con la instalación de cinco atrapanieblas más, beneficiando a las familias locales que dependen de este recurso para su sostenibilidad. Este esfuerzo reafirma su compromiso con la conservación de las Lomas de Villa María, integrando acciones ambientales y sociales que no solo protegen el ecosistema, sino que también mejoran la calidad de vida de la comunidad circundante.
Este proyecto demuestra cómo la acción climática estratégica puede generar un impacto ambiental, social y económico sostenible, alineándose con objetivos globales de conservación y contribuyendo al bienestar de las futuras generaciones.