El gerente general del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), Gustavo De Vinatea, señaló que esperan que para el próximo año se destraben proyectos como Corani en Puno, San Gabriel en Moquegua, que inicie la construcción de Zafranal en Arequipa, Pampa de Pongo también en Arequipa y Trapiche en Apurímac.
“Todavía no tenemos estimaciones oficiales para el 2025, pero esperamos que se destraben todos estos proyectos por casi US$ 5,000 millones de inversión. Esto va a ser muy importante en el sur del Perú”, señaló en entrevista con RCR Perú.
Asimismo, resaltó los avances del sector minero en el transcurso del 2024, en base a las cifras publicadas por el Ministerio de Energía y Minas (Minem). “Hemos bordeado los US$ 5,000 millones inversión. Ha habido un aumento notable de inversión en equipamiento versus el mismo periodo del año pasado, 42% de incremento, esto implica una inversión interesante en innovación y nuevas tecnologías”, indicó.
En ese sentido, se mostró optimista de contar con minería de clase mundial en el país, tanto por parte de empresas extranjeras como nacionales, que operan con última tecnología y las mejores prácticas de minería a nivel global.
En cuanto a la exploración, explicó que ha habido un alentador incremento de 23% respecto al año anterior. “Sabemos que hay 75 proyectos de exploración por US$ 644 millones. Eso nos debe dar una mirada esperanzadora del futuro de la minería en el Perú”, apuntó.
De igual manera, recalcó que, para este año, se espera superar los US$ 44 mil millones en exportaciones mineras y recordó que la minería representa más del 66% de las exportaciones del país. “Es una cifra muy importante y permite una relación estable y sana en la balanza comercial. Eso nos ha protegido de diversos conflictos que se han dado en el mundo en los últimos tiempos”, refirió.
Desafíos pendientes
Por otro lado, hizo mención de la minería ilegal y la formalización minera como dos grandes retos pendientes en el sector minero, que vienen afectando a toda la ciudadanía del país.
“La criminalidad en el ámbito minero es la actividad ilícita más fuerte del país, es decir ha desplazado por lejos al narcotráfico. La minería ilegal está generando toda la inseguridad ciudadana que hoy percibimos los ciudadanos de a pie. El incremento del crimen en nuestro país tiene mucho que ver con la cantidad de dinero que mueve esta actividad (…) genera una desintitucionalización del país muy lesiva”, dijo De Vinatea.
En cuanto a la formalización minera, consideró que este es un tema muy complejo y se necesita “ir con un bisturí muy fino separando lo que es minería a pequeña escala y minería artesanal, a quienes siempre el Estado debe dar todos los mecanismos para su formalización”.
“Lo dificultoso que era formalizar este segmento de la minería fue lo que generó la creación del Reinfo, este registro que hoy día está vigente, esperemos que solo hasta diciembre de este año y ahí hay que estar muy atentos todos los peruanos de que el Congreso no vaya a prorrogar por más tiempo el Reinfo que, lamentablemente, ha servido de paraguas para la impunidad de estas organizaciones criminales”, anotó.