Pese a las dificultades políticas y sociales, el sector minero en el Perú se encuentra en constante desarrollo. Así lo demuestra la Cartera de Proyectos de Inversión Minera 2024, elaborada por el Ministerio de Energía y Minas (MINEM), que registra un total de 51 proyectos en 18 departamentos, con una inversión conjunta de US$ 54,556 millones. Este aumento representa un crecimiento del 2.7% (US$ 1,426 millones) en comparación a los 46 proyectos registrados en la actualización de julio del 2023.
En la nueva cartera, el MINEM reporta cinco proyectos en etapa de ejecución, los cuales involucran una inversión conjunta de US$ 4,458 millones, cifra que representan el 8.2% de la inversión global en cartera. Entre estos, podemos mencionar: Reposición Antamina, que avanza a la etapa de ejecución para el primer semestre del 2024; Reposición Inmaculada y Yumpag, que pasaron de la etapa factibilidad a ejecución en el último trimestre del 2023; y el proyecto Ampliación Toromocho Fase II, cuya fase de ejecución comenzó a mediados del mismo año. Asimismo, el proyecto San Gabriel inició su ejecución en el 2022 y actualmente se encuentra en construcción, y se proyecta la puesta en marcha operativa para el 2025.
Contando solo los proyectos en etapa de ejecución, se estima que generarán para el 2024 alrededor de 5,367 nuevos empleos directos. Pero, sumando los nuevos seis proyectos, ascenderían a 9,620 nuevos empleos directos a lo largo de su fase de ejecución.
Desde Adentro exploró de cerca el proyecto aurífero San Gabriel, en Moquegua; Reposición Inmaculada, en Ayacucho, que explotará oro; así como el proyecto cuprífero Reposición Antamina, en Áncash, que luego de obtener sus certificaciones ambientales, se encuentra próximo a ejecutar las inversiones para su desarrollo. Estos, con su propia historia y desafíos, serán claves en la continuidad de la actividad minera peruana.
SAN GABRIEL
En marzo del 2022, Compañía de Minas Buenaventura anunció el inicio de la fase de construcción del proyecto San Gabriel. Sin embargo, el 15 de junio del mismo año, la construcción se suspendió debido al contexto social de su zona de influencia directa. Posteriormente, el 28 de octubre del 2022, tras reuniones con autoridades y comunidades, la empresa comunicó el retorno progresivo de los trabajos preparatorios.
El proyecto cuenta con el respaldo del Estudio de Impacto Ambiental detallado (EIA-d) para actividades de explotación, aprobado en marzo del 2017, y la conformidad al Cuarto Informe Técnico Sustentatorio (4to ITS EIA-d), obtenido en agosto del 2023. “San Gabriel cuenta ya con todos los permisos ambientales y de construcción mineros. El EIA para la línea de transmisión ha concluido el proceso de participación ciudadana con éxito y está en proceso de absolución de consultas que debería culminar en el segundo trimestre”, señala la empresa a Desde Adentro.
A diciembre del año pasado, el avance en la ejecución financiera fue del 27%. “El plan es iniciar la producción en la segunda mitad del 2025 con un ramp-up (escalamiento de la producción) gradual. Considerando el 2026 como un año completo de producción, se estima entre 120 y 140 mil onzas de oro anuales por 14 años de reservas”, agregó la compañía minera.
INMACULADA
La operación subterránea de Reposición Inmaculada, operada por la Compañía Minera Ares del grupo Hochschild, representa una inversión de US$ 1,319 millones y está en fase de ejecución, con la aprobación para la construcción de la tercera fase de la presa de relaves. Su objetivo primordial es prolongar la vida útil hasta el año 2042 mediante la expansión de las labores subterráneas para la extracción de minerales de oro y plata y evaluar la viabilidad de nuevas minas. Sin embargo, ha enfrentado desafíos, como el retraso en la aprobación del Estudio de Impacto Ambiental detallado (MEIA) y los bloqueos de carreteras comunitarias durante el primer trimestre del 2023, que impactaron en su producción y costos.
A pesar de estos obstáculos, se espera que los resultados se vean compensados por la calidad del mineral y las medidas de eficiencia implementadas. Durante el cuarto trimestre del 2023, se realizaron 900 metros de perforación potencial, interceptando dos nuevas estructuras, Nicolas y Andrea, que serán investigadas más a fondo en el 2024, según se detalla en los resultados anuales de la empresa minera. Además, se están explorando terrenos abandonados para maximizar la vida útil de la mina y se espera agregar entre 0.5-0.6 millones de onzas de oro equivalente por año en los próximos cuatro años. “El Grupo cree que se obtendrán los permisos necesarios para que las operaciones puedan continuar sin interrupción”, señala el citado informe.
Con permisos otorgados por 20 años desde agosto del 2023, el proyecto tiene una base sólida para una producción continua. Se anticipa una disminución significativa en los costos operativos a partir del cuarto trimestre de 2024, lo que contribuirá aún más a su rentabilidad. El impacto de Reposición Inmaculada en la economía local y nacional, así como su contribución a la industria minera peruana, lo posiciona como un proyecto de gran relevancia en el panorama minero del país.
ANTAMINA
El proyecto de Reposición Antamina tiene como objetivo realizar modificaciones aprobadas en el área minera de Antamina, lo que permitirá mantener las operaciones actuales y ampliar la mina por otros ocho años adicionales.
El 14 de febrero del 2024 se aprobó la Modificación del Estudio de Impacto Ambiental detallado (MEIA-d) por parte del Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las Inversiones Sostenibles (Senace). Posteriormente, el proceso implica obtener los permisos de construcción y operación, los cuales están bajo la responsabilidad técnica del Ministerio de Energía y Minas (MINEM), según informa la empresa. La obtención de estos permisos será crucial para avanzar en el proyecto.
La inversión, estimada en US$2,000 millones, se extenderá a lo largo de entre seis y ocho años. Esto se debe a que se tienen que aprobar los permisos sectoriales específicos, además de las aprobaciones internas que siguen su propio curso. Lo más probable es que los primeros permisos duren el resto del 2024, destacan fuentes de la compañía minera.
Con un horizonte amplio y desafiante, los proyectos mineros en marcha para el 2024 marcan un hito en el desarrollo económico del Perú.
