Hatch, consultora canadiense de ingeniería, cuenta con más de 68 años de historia y en el Perú opera desde 1995. Ahora, incorporada a la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), ha puesto su experiencia y conocimientos a disposición de los asociados del sector minero energético. Desde Adentro conversó con Pamela Florián, country manager de Hatch Perú, sobre sus planes y proyectos, y las expectativas de la empresa frente a la economía peruana.
¿Qué significa para Hatch ingresar a la SNMPE? ¿Cómo esperan aportar al gremio?
En Hatch estamos resolviendo los problemas más complejos del mundo presente. Trabajamos de manera compartida y en sociedad con nuestros clientes, los cuales tienen voz y voto en la SNMPE. Por eso, queremos estar allí, acompañándolos, ayudando y contribuyendo a revisar los temas actuales de agenda como innovación, descarbonización, ahorro y optimización de energía, gestión eficiente de proyectos, mejora continua, remotización de operaciones, excelencia operacional, ingeniería digital, entre otros tanto en el rubro de minería como también en el sector de energía. Queremos empezar a compartir más con la sociedad lo que venimos haciendo. Por otro lado, queremos ampliar nuestro relacionamiento con otros potenciales clientes y aumentar nuestra exposición y contribución en el rubro minero energético. Aspiramos a que Hatch sea visto como un socio de largo plazo que brinde soluciones implementables y sostenibles. Formar parte de la SNMPE nos abre la posibilidad de participar, generando sinergias y puntos de discusión en un foro relevante para sectores claves en Perú.
¿Cómo perciben el crecimiento del sector minero energético?
Somos una empresa de ingeniería y consultoría. Nuestro involucramiento con clientes, sobre todo mineros, se extiende en todo el ciclo de vida: exploración, prospección, operación y cierre. Además, brindamos soporte sobre decisiones estratégicas en transacciones, diversificaciones, tanto en commodities como en productos, entre otros. Esta visión amplificada nos permite entender a profundidad las tendencias de consumo y las proyecciones de demanda de metales y energía. De acuerdo con lo anterior, podemos decir que la tendencia en el mundo mantiene la demanda creciente para metales críticos y un déficit de oferta sobre algunos metales como el cobre, con picos de déficit a partir del 2035. En general, se espera incrementar el consumo de metales críticos como cobre, litio, cobalto, níquel, aluminio entre otros, por lo menos en cuatro veces el valor actual, hasta el 2040. Eso implica destrabar y ejecutar el pipeline de proyectos mineros y que, en el caso de las organizaciones más maduras, se continue con la profundización de sus operaciones y en otras la diversificación de minerales respecto de lo que comercializan hoy. Venimos trabajando con nuestros clientes en brindar soluciones a todo ello.
Hatch es una empresa con un largo historial de vida ¿Cómo y por qué iniciaron sus operaciones en Sudamérica?
Empezamos operaciones a demanda de nuestros clientes corporativos globales a finales de los noventas. Hatch es también una empresa global, tenemos más de 150 oficinas y un enfoque integral de respuesta a nuestros clientes y hemos expandido nuestras operaciones a su solicitud. Empezamos con Chile y Brasil, y luego nos expandimos al Perú y, finalmente, a Colombia en Sudamérica. Tenemos un enfoque regional con cuatro oficinas integradas como una y un reporte directo a Hatch a nivel global. Hatch tiene tres sectores de enfoque: metales, energía e infraestructura con prácticas como ingeniería, consultoría, ESG, digital, entre otras, transversales a todos los frentes. En el Perú el 90% de nuestros clientes se encuentran en el rubro minero (metales).
Para darnos una idea de su crecimiento ¿Cuál es el orden de sus ventas y de su facturación? ¿Cuántas personas trabajan con ustedes?
Tenemos tasas de crecimiento anual muy exigentes y positivas. E, incluso en épocas complicadas, como la pandemia, hemos crecido. En los últimos años nos hemos enfocado en ayudar a nuestros clientes a resolver sus problemas más importantes, retando los desafíos del mercado y estamos enfocados en la generación de valor. Todo ello, nos ha llevado a convertirnos en lo que nosotros llamamos un ‘partner’ o un socio preferente para las compañías que están apostando cada vez más por desarrollar soluciones que les permitan asegurar la vida de la mina por un mayor periodo de tiempo a costos competitivos, implementando soluciones factibles y hechas a medida. Estamos convencidos de que las soluciones a implementar para impactar al mundo positivamente como la descarbonización deben ser sostenibles y por ello no escatimamos esfuerzos en involucrar a expertos globales. Actualmente, estamos implantando ingeniería para descarbonizar, electrificar y estudiamos el uso de diversas fuentes de energía renovables. Somos líderes en desarrollo de tecnologías para litio, por ejemplo, pero también otros metales críticos que son componentes de baterías, como el níquel, por ejemplo. Estamos generando alianzas con compañías de tecnología e inteligencia artificial, como Microsoft o las compañías automotrices para optimizar composición de baterías. Definitivamente, puedo comentarte que la tendencia es a seguir creciendo. Por otro lado, somos aproximadamente 80 personas trabajando en las oficinas de Hatch y, con trabajadores indirectos, pasamos las 120 personas. Del total, tenemos un 42% de mujeres en la oficina de Lima.
Todo el trabajo que hacen abre perspectivas no solo para trabajar con el sector minero, sino también con el sector energético, ¿es así?
De hecho, Hatch nació hace 28 años en el Perú netamente enfocada en el rubro minero y hoy ya estamos trabajando en proyectos y brindando consultoría para dar soluciones a temas de energía, tanto en el rubro hidroeléctrico como para el sector de energías renovables. Tenemos un equipo global con base en Canadá para ello y también tenemos proyectos en zonas remotas con plantas de hidrógeno verde. Somos una organización global muy plana y conectada, por lo que es simple contactarnos con los expertos, tomadores de decisiones, los técnicos y especialistas para implantar una solución en cualquier lugar del mundo.
¿Cuáles serían sus principales proyectos y clientes en el Perú?
Estamos trabajando en el rubro de la consultoría, prácticamente, con los clientes más importantes del Perú en el rubro de la gran y mediana minería. Los ayudamos a definir los conceptos de lo que va a venir en adelante como un desafío a implementar. Por ejemplo, clientes que están extendiendo la vida de la mina, otros que tienen problemas con el manejo, disposición, control y gestión eficiente de sus relaves, clientes que están reconfigurando y centralizando operaciones, implementando nueva tecnología, cerrando operaciones, o haciéndolas más simplificadas y “remotizando” las mismas. La constante entre nuestros proyectos es brindar soporte a cambios en operaciones actuales o acompañamiento en el diseño de nuevas operaciones. Hoy, afrontamos retos de sobrecostos logísticos, inflación mundial, limitación de uso de tierras, limitación de facilidades de transporte y disponibilidad de tierra o puertos, duración de permisos y tramites, complejidad social, entre otros. A partir del entendimiento profundo del negocio minero, podemos definir y recomendar soluciones que aborden el problema de manera integral en todas sus fases. Estas soluciones aportan a tener un modelo operativo más ágil permitiendo ser más competitivo en el mercado porque al ser los minerales un commodity, el precio final ya está determinado.
¿Qué otros proyectos podrían contarnos?
Trabajamos con compañías mineras e en su ruta de descarbonización y las acciones de ingeniería necesarias para implementarlas. Colaboramos con clientes que tienen problemas sobre sus operaciones actuales y las quieren mejorar u optimizar, y con aquellos que tienen una visión futura de adónde quieren llegar, pero necesitan organizar y planificar ese cambio. Somos también pioneros en tecnología. Para el proyecto Yanacocha Sulfuros, de Newmont, diseñamos y construimos la autoclave, la primera tecnología de lixiviación a presión en el Perú. Desarrollamos tecnología para pirometalurgia, manejo de gases, producción de Litio, hidrógeno verde, entre otros.
También los hemos acompañado a hacer la transición de proyectos a operaciones o el plan de desarrollo de negocios o restart de muchos de los proyectos greenfield y brownfield en Sudamérica en los últimos cinco años. Desde aquí exportamos conocimiento y desarrollamos diferentes proyectos en todo el mundo.
Hemos trabajado en la definición de las hojas de ruta de descarbonización para operaciones complejas en compañías importantes de nuestro país. Por ejemplo, si una operación minera tiene un compromiso climático con el ICMM [el Consejo Internacional de Minería y Metales] tienen que detallar cuál va a ser la hoja de ruta para llegar a descarbonizar sus operaciones y cuáles son los objetivos al 2030 y al 2050 para lograr ser carbono neutrales. Nosotros definimos y planteamos las soluciones para luego, empezar a implementar la ingeniería necesaria para poder hacerlo. Todo esto se hace siguiendo los estándares de ejecución de proyectos formales. El mundo ya viene avanzando en rutas de electrificación para equipos móviles en minas. Sudamérica tiene dos proyectos en curso dentro de lo que son las minas más grandes, que ya se encuentran en estudios de ingeniería, es decir, en prefactibilidad para pasar a factibilidad. En el Perú, una de las minas más grandes de producción de cobre ha iniciado el estudio de electrificación de su flota de mina. Esto implica dejar de usar diésel y empezar a usar trolleys, o soluciones mixtas que ayuden a descarbonizar el área mina.
¿Qué expectativas tienen de la recuperación económica en Perú y de los sectores en los que ustedes están presentes?
En el Perú y en América Latina vemos una tendencia a la recuperación en lo que respecta a la inversión minera, y eso se debe al contexto mundial: la necesidad de minerales críticos, tanto para la tecnología como para el desarrollo de proyectos, asociado a una demanda eléctrica más limpia. El Perú tiene recursos importantes en el rubro minero, estos recursos son requeridos por el mundo y, dado que nosotros somos expertos en estos temas, tenemos una oportunidad bastante interesante en nuestro país para seguir creciendo, debemos mantenernos cerca y acompañar a las empresas en este desafío, aportando en desarrollo de soluciones para proyectos y operaciones de mina, planta, relaves o en cualquier otra área. El mundo tiene muchos retos, pero en conjunto debemos enfrentar esos desafíos y tomar acciones con sentido de urgencia.
Nosotros trabajamos como socios, ayudamos a desarrollar ideas, desafiamos el statu quo. Hoy somos competitivos, pero en realidad nos puede ir mejor. Creamos tecnología e implementamos soluciones a través de la innovación para crear un mundo mejor.