Hace unos días la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) presentó en el Comité del agua de la SNMPE el estudio de la Gobernanza del agua en el Perú, un informe que reúne recomendaciones para fortalecer la gestión integrada de los recursos hídricos encaminada al desarrollo sostenible del país y en la que participamos enviando aportes y comentarios. El informe se vuelve relevante en un contexto en el que tres millones de peruanos carecen de acceso a servicios de agua y 8.2 millones a servicios de saneamiento.
El informe publicado en marzo del 2021 se centra en la gobernanza multinivel, los instrumentos económicos y la regulación de los servicios de agua y saneamiento.
Gobernanza multinivel
Sobre la gobernanza multinivel, el estudio hace especial énfasis en hacer efectivos los roles, responsabilidades y actividades que giran en torno a la gobernanza del agua. Por ello, la OCDE recomienda avanzar hacia un enfoque holístico e integrado en la gestión de los recursos hídricos; evaluar el marco legislativo y su implementación; garantizar suficiente personal y experiencia técnica para ejecutar los planes de gestión de recursos hídricos; y fortalecer la información y conocimientos sobre los riesgos actuales y futuros de la contaminación del agua, sequías e inundaciones, entre otros puntos.
Instrumentos económicos
En cuanto a los instrumentos económicos, la OCDE destacó el uso de pagos por servicios ecosistémicos, que el Ministerio del Ambiente introdujo en el 2015 mediante el Mecanismo de Retribución por Servicios Ecosistémicos (MERESE), que permite que las partes interesadas puedan retribuir voluntariamente de manera económica por el uso ecosistémico del que se beneficien. Sobre ello, el estudio resaltó que hasta el 2019 se han recaudado US$ 43 millones por este concepto.
Por otro lado, existen pagos por extracción y descargas de agua, que desde 2009 la Autoridad Nacional del Agua (ANA) aplica a usuarios. Sin embargo el estudios menciona que es un monto insuficiente para cubrir los gastos de funcionamiento de dicha autoridad. La OCDE recomendó, por ello, aumentar el uso de los pagos por servicios ecosistémicos, fortalecer los incentivos por cargos de extracción y contaminación basados en los riesgos del agua para desarrollar una “cultura del agua”; reunir apoyo financiero diverso; y buscar la coherencia de políticas entre los instrumentos económicos.
Regulación de servicios de agua y saneamiento
Por último, sobre la regulación de los servicios de agua y saneamiento, Perú presenta un mercado fragmentado y con diversas formas de organización. Esto, desde empresas prestadoras de servicio hasta organizaciones comunales. Ante ello, la OCDE sugirió evaluar el marco normativo y la capacidad de implementación de iniciativas; asegurar una gobernanza y capacidad adecuadas del regulador SUNASS; y mejorar la recolección de datos y el monitoreo del desempeño del sector.
La OCDE tomó como casos de estudio las cuencas de Ica, Olmos, Chillón, Rímac y Lurín para este informe, que es resultado de un proceso colaborativo con el soporte del Ministerio del Ambiente y la ANA.