Metalor Technologies, proveedor líder de metales preciosos y materiales avanzados con sede en Suiza, anunció el lanzamiento del “Pasaporte Geoforénsico”, una novedosa herramienta científica que permite validar el origen del oro minero que se procesa en las refinerías de metales preciosos.
Barbara Beck, doctora de la Universidad de Lausana, quien ha validado esta herramienta científica, señala que los programas de suministro responsable de metales preciosos que se han desarrollado masivamente en la última década tienen en común un punto débil: “se basan en políticas de cumplimiento, auditorías, y en un entorno que no está libre de corrupción», afirma.
El ADN de cada oro doré, en cambio, consiste en analizar sistemáticamente el metal tras su recepción en la refinería, por lo que es inmune a cualquier interferencia local y a cualquier sesgo en la documentación, explica Beck. El pasaporte geoforénsico se basa en el contraste de dos bases de datos con casi 10 mil análisis desarrollados por Metalor alrededor del mundo, que se actualizan dinámicamente.
Es decir, cada muestra analizada se agrega a las bases de datos una vez validada. Así, se actualiza con el tiempo para reflejar las variaciones encontradas en cada envío de oro. Por ejemplo, que provenga de una nueva veta, o que el oro se extraiga de vetas más profundas. “Esto permite que el método sea extremadamente sensible a los cambios, por mínimos que estos sean”, explica Jonathan Jodry, jefe de Laboratorios y Desarrollo de Nuevos Negocios de Metalor Technologies.
Por ahora, el sello no tiene ningún costo. “Forma parte de nuestro procedimiento de cumplimiento para los clientes con los que trabajamos”, explica Manuel Rodríguez-Mariátegui, gerente general de Metalor Technologies Perú.
Las expectativas con este trabajo son altas. “Excluir el oro doré de origen dudoso del sistema tiene que ser una prioridad para nuestra industria, ya que esto va en sincronía y está estrechamente relacionado con la necesidad de mejorar las condiciones de trabajo de los mineros artesanales para que trabajen en la economía legal», finaliza Rodriguez-Mariategui.