Desde mediados del año pasado hasta hoy, Las Bambas sufrió dos paralizaciones en menos de un año, acumulando 90 días sin poder operar. Cuajone estuvo más de 40 días paralizada. Toromocho, Cerro Lindo y Antapaccay, también detuvieron sus actividades.
En medio de esta situación, ¿cuál fue la opinión de los ciudadanos alrededor del sector? El informe “Retos y oportunidades del sector de recursos naturales en el Perú”, publicado por la consultora Llorente y Cuenca (LLYC), da cuenta de ello.
A partir de la revisión durante un año de conversaciones alrededor del sector minero en medios digitales (Twitter, noticias digitales, blogs y foros), el estudio evidenció los principales ejes de comunicación, así como los potenciales riesgos y oportunidades para las empresas de la industria extractiva, explica Ian Fonseca, director de Deep Digital Business de LLYC, autores del informe.
Vocería y oportunidades
Del total de conversaciones recabadas, solo 2% tuvo un tono positivo -centrado principalmente en las acciones realizadas por las empresas mineras durante la pandemia de la COVID-19; un 78% fueron neutrales, y un 21% estuvieron centradas en conversaciones negativas en torno al sector minero. A partir de estas cifras, los consultores lograron identificar riesgos potenciales.
Uno de estos, se refiere a no aprovechar la posibilidad de posicionar mensajes positivos que permitan señalar las cualidades, atributos y aportes sociales de las empresas. Al no ser ocupado por las empresas o sus interlocutores, deja el espacio libre para que otros agentes sociales planteen posiciones contrarias al sector.
Miguel Cassinelli, director de Comunicación Corporativa Extractivas de LLYC, señala que las explicaciones sobre el uso de los recursos que aporta la minería para obras sociales no provienen necesariamente de las empresas privadas, “sino de voceros antimineros de la zona”, afirma.
Con ello, se ha identificado una oportunidad, un gran espacio para posicionar mensajes positivos frente a interlocutores, voceros y autoridades.
Para ello, no solo las empresas deben comunicar, sino también usar redes de stakeholders a los cuales entregar información constantemente, tener puntos de encuentro con la comunidad, o voceros o interlocutores que se hayan ganado a la comunidad y a la prensa.
Recomendaciones
Así, el estudio establece cuatro recomendaciones principales para reivindicar al Perú como un país minero:
- Desarrollar una comunicación proactiva de cara a las cualidades, atributos y aportes sociales de las empresas.
- Establecer un relato acorde a los objetivos de la industria, de manera oportuna y propositiva, y sin caer en la confrontación con el Gobierno.
- Posicionar a los líderes del sector minero en formato multiplataforma e identificando nuevas audiencias.
- Desarrollar una estrategia de comunicación integral que permita promover la buena reputación en torno a las empresas.