Rosa María Flores-Araoz tiene un hábito que la carga de energía. Los sábados o domingos puede salir de Lima, llevar su bicicleta y luego pedalear hasta 50 kilómetros por trochas y caminos de tierra, pero de lunes a viernes, la gerente general de Kallpa Generación, encabeza una compañía que con tres centrales hidroeléctricas y cuatro plantas termoeléctricas abastece a casi el 25% del mercado eléctrico nacional, además de participar en el negocio de la producción de hidrocarburos a partir del gas natural.
Estudiaba y trabajaba a la vez, y la carrera la llevó por diferentes empresas. A los 26 años, cuando laboraba en un banco, comenzó su vínculo con el sector eléctrico. “Por una casualidad”, dice ella. Uno de sus exprofesores, en una maestría que siguió en la Pontificia Universidad Católica de Chile, le pidió que lo reemplazara en un curso que dictaba para ejecutivos de Edelnor (hoy Enel Distribución). Ese curso le abrió las puertas de la empresa y la contrataron. Luego pasó a la SNMPE, donde fue analista y gerente del sector eléctrico, y el siguiente paso en su carrera fue en una compañía de generación. Finalmente, en el 2010 llegó a Kallpa. “Fue una casualidad que agradezco. Me encanta el sector, es muy dinámico, un servicio tan importante para el país”.
En su ingreso a Kallpa tuvo tareas directas con la Gerencia General, porque la idea era prepararla para que tome ese cargo más adelante. Desde entonces vivió retos permanentes ya que la compañía ha estado en constante crecimiento, invirtiendo en centrales de energía en el país. “Todos los días tienes que gestionar cosas para cumplir con plazos o presupuestos. Se puede tener buenas relaciones con la comunidad, clientes, competencia, Estado, y demás stakeholders, estando siempre preparados para nuevos desafíos que se pueden presentar. Estos retos hacen que uno quiera siempre ser mejor”, dice.
Hoy en Kallpa hay un mayor número de mujeres como practicantes o que son referidas a través de diversos programas, pero Rosa María Flores-Araoz remarca que lo principal es la igualdad de oportunidades que existe, sin importar el género, para competir por un puesto en la compañía. “Tenemos un sistema de prácticas muy grande porque nos interesa enseñar. Hoy tenemos más practicantes mujeres que antes, lo que indica que hay más chicas interesadas en estudiar ingeniería eléctrica y otras carreras afines. En las plantas también tenemos supervisoras, operadoras, jefas de área”, señala.
Aunque falta mucho por recorrer en el Perú, está convencida de que hoy las mujeres tienen más oportunidades. “Mis padres nos enseñaron a mis hermanas y a mí a correr por los sueños, abrazarlos, y trabajar duro para lograrlos”. Es algo que trata de transmitir, suele estar pendiente de lo que hacen sus colaboradores, en especial las mujeres, les pregunta por sus familias, por su salud, qué es lo que hacen en sus ratos libres, sus hobbies y aficiones.
“En toda mi carrera, tuve jefes que me impulsaron a continuar, a lucharla, a seguir estudiando, y me repetían que con ganas todo se podía. Hoy el equipo de Kallpa hace que todo se pueda”, afirma. Durante la pandemia la generación de energía obviamente nunca se detuvo y quedaron lecciones como estar alerta a la salud del compañero. “¡No sé en qué momento como país perdimos la empatía y la preocupación por lo que le pasa al otro!”, dice la gerenta que aspira a ver un Perú donde todos tengan agua, electricidad, acceso a salud y educación de calidad.
Su carga laboral jamás bajó, aunque pudo equilibrar el tiempo entre la familia y el trabajo. Para poder cumplir con lo que se proponía, apeló a esta combinación: ganas, corazón e inteligencia. “Mi esposo creyó en mí desde el primer día, me impulsó a salir adelante, y les enseñó a mis hijos desde muy chicos que mamá tenía dos ocupaciones, su casa y su trabajo, y que tenían que apoyarla. No hubiera llegado hasta donde estoy sin la maravillosa familia que tengo”, confiesa Rosa María Flores-Araoz. Hoy que sus hijos ya están grandes, tiene un nuevo reto personal: volver a enseñar en la universidad. Otra meta que seguramente cumplirá.