AESA, empresa especializada en el desarrollo de infraestructura y obras civiles mineras, está apostando por la innovación. Guillermo San Miguel, gerente general de la empresa, comenta que se han posicionado en la oferta de soluciones innovadoras y especializadas en el desarrollo, preparación y sostenimiento minero, como también en el transporte en túneles subterráneos.
Mediante tecnologías avanzadas, como aplicaciones móviles y dispositivos de monitoreo de sueño, AESA garantiza condiciones óptimas de trabajo y seguridad para su personal. “A través de una app, por ejemplo, tenemos incorporadas pulseras que miden la calidad y cantidad de horas de sueño que tiene cada uno de nuestros trabajadores para asegurar si están entrando correctamente descansados o si tienen algún grado de fatiga o somnolencia que pueda afectar el desarrollo de su trabajo”, explicó San Miguel.
En el ámbito de la productividad, AESA ha adoptado tecnologías de captura de datos en tiempo real para optimizar la eficiencia de sus operaciones subterráneas. La recopilación y análisis de información sobre el rendimiento de equipos permite a la empresa seguir avanzando en la mejora de la gestión de los activos con un enfoque TCO (Total cost owner), lo que permite intervenir proactivamente para mantener altos estándares operativos y de mantenimiento.
“Estamos constantemente innovando para garantizar la seguridad, mejorar nuestra productividad y entregar la calidad que necesita cada uno de nuestros clientes”, afirmó el ejecutivo.
AESA tiene una relación con el sector minero centrada en tres pilares: seguridad, productividad y calidad. En términos de seguridad, la empresa ha implementado un sistema certificado por ISO 45001, enfocándose en capacitación constante, gestión del cambio y prevención de riesgos para sus colaboradores.
Empleabilidad
Además de su enfoque técnico, AESA se distingue por su compromiso con la empleabilidad local. Programas como el de Formación Local en la mina San Rafael (de Minsur) han capacitado y brindado oportunidades laborales a los residentes de las comunidades cercanas, contribuyendo al desarrollo económico y social de los distritos de Antauta y Ajoyani y sus centros poblados. Este compromiso no solo fortalece el vínculo con las comunidades, sino que también mejora la sostenibilidad de las operaciones mineras.
“El año pasado hicimos el tercer programa de Formación Local. Fueron 25 personas inscritas, de las cuales hemos contratado 23. En San Rafael tenemos casi 950 colaboradores, de los cuales el 39% es empleado local del área de influencia directa”, señaló San Miguel.
El ejecutivo considera que los proveedores mineros son una fuente importante de empleo en el sector. “Formamos parte de la cadena de valor de las empresas mineras, y tenemos que trabajar en conjunto para ver cómo potenciamos ese valor”, concluyó el ejecutivo.