El presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Raúl Jacob, reflexiona sobre los 126 años de vida institucional del gremio.
La SNMPE cumple 126 años de vida. ¿Qué reflexiones le suscita un aniversario más de la institución?
Si uno mira las instituciones que han perdurado en el tiempo, normalmente son muy sólidas y unidas. La SNMPE ha demostrado a lo largo de toda su trayectoria una gran solidez, un compromiso con el país, y unidad. Eso es motivo de orgullo para nosotros, pues hay un gran aporte al progreso económico del Perú, al progreso de la población, al desarrollo a través de justamente actividades que, por su naturaleza, son descentralizadas. Las minas, las plantas de energía, los desarrollos de hidrocarburos, gas y petróleo no están en las grandes ciudades y, en el caso del Perú, no están en Lima. Están, en la mayoría de los casos, en lugares remotos y son las promotoras del desarrollo del país.
Recién terminado el 14 Simposium Internacional del Oro, Plata y Cobre, ¿cómo se condice esta capacidad de la minería de ser un socio transformador para el desarrollo con el pedido de normas claras y estabilidad jurídica que hizo la industria?
Es muy importante tener una mirada de largo plazo. Hoy en día —y esto es algo que se habló en el Simposium— la minería peruana es la actividad económica de mayor importancia para la lucha contra el cambio climático y el calentamiento global al proveer los metales que se requieren para solucionar este gran peligro. Entonces, tenemos la oportunidad de proveer los metales necesarios para desarrollar las tecnologías que reemplacen la energía basada en fuentes no óptimas por energía limpia, como las eólica, solar u otras. Todo este cambio en la matriz energética a nivel mundial va a poder ser soportado por la minería del Perú, pero necesita tener condiciones adecuadas para seguir creciendo.
¿Cuáles son esas condiciones?
Estas son inversiones que requieren largos periodos de maduración y de recuperación. Entonces, estos tiempos extensos necesitan de una gran estabilidad en las reglas de juego. Y este es un pedido constante porque es de gran importancia para generar las condiciones que permitan aprovechar la gran oportunidad de contribuir a la lucha contra el cambio climático a la vez que desarrollamos el país mediante estas inversiones y de los puestos de trabajo que genera la minería de manera directa e indirecta.
Uno de los principales pedidos de los empresarios al Estado es mayor institucionalidad. ¿Cómo está contribuyendo la SNMPE a la institucionalidad en el Perú?
La estabilidad de una institución es ya en sí misma un elemento que contribuye con la institucionalidad. Tenemos una asociación que ha cumplido 126 años de vida institucional y que siempre ha querido aportar y ser positivos en cuanto a qué podemos hacer para mejorar y desarrollar más el Perú. Y, evidentemente, uno de los elementos más importantes es la creación y el desarrollo de un PBI minero energético sólido y vibrante. Es decir, que también incluya la producción de energía e hidrocarburos. Estas son tres locomotoras que tiene el Perú para llevarlo al desarrollo. A eso se agrega una red de proveedores cada vez más importante.
La estabilidad a largo plazo que nosotros requerimos y tratamos de implantar dentro de nuestras organizaciones es algo que también se ha hecho en la SNMPE. El gremio ha mantenido este carácter, esta estabilidad a lo largo del tiempo. Las compañías siempre han sido muy generosas en apoyar las iniciativas del gremio y esto ha permitido contar con un equipo de primer nivel, el cual me siento orgulloso de liderar, tanto en la parte de las empresas como en el staff de la Sociedad.
¿Qué lecciones puede compartir la SNMPE sobre forjar instituciones que superen la centuria?
Los primero es poner siempre al país por delante. Pensar en qué es lo mejor para el Perú. Pensar en el gran interés nacional y cómo nuestras actividades pueden aportar a ello. Creo que este es uno de los elementos clave. Lo segundo es mantener la unidad del gremio. Pienso que algo que nos ha ayudado muchísimo a lo largo de los años es que, cuando las autoridades quieren hablar con el gremio minero energético, nos tienen como un interlocutor que está pensando en el bien del país y que, además, es representativo de la industria. Consecuentemente, si hay un compromiso de la SNMPE sobre un tema en particular, es claro que las compañías agremiadas van a cumplir con él.