La paralización de las obras de construcción del sistema de distribución de gas natural en la provincia de Sechura por actos de violencia de un grupo de personas, que no cuentan con representatividad de la comunidad, significa un serio riesgo para el futuro de la distribución de este recurso y generaría un perjuicio a 250,000 piuranos, que podrían dejar de contar con el servicio en sus hogares en los tiempos previstos por la empresa.
Así lo advirtió la empresa Gasnorp que tiene a su cargo la concesión para la distribución de gas natural en la región Piura, al solicitar a las autoridades competentes y a los legítimos representantes de la Comunidad Campesina San Martín de Sechura a intervenir en esta situación.
Refirió que este hecho –que se mantiene vigente– también afectaría la inversiones adicionales de US$ 150 millones que la empresa tiene comprometida, se perderían 700 oportunidades de empleo proyectadas en la etapa de construcción y perjudicaría a los proveedores locales.
“De continuar esta medida o de registrarse nuevos actos de violencia injustificados, también se pondría en riesgo la continuidad del proceso de masificación de gas natural que forma parte de la Política Energética Nacional impulsada por el gobierno peruano”, puntualizó.
Desde el pasado martes 14 de diciembre, la compañía tiene paralizados todos los trabajos en los tramos 11 y 12 del gasoducto para el transporte del gas natural (incluyendo 4 válvulas de seccionamiento), luego de que un grupo de personas atentara contra la seguridad del personal que realizaba labores en esas zonas, ocasionando daños en equipos e insumos. Las acciones de fuerza serían promovidas por el señor Henry Zavaleta, quien no acreditó legalmente ser presidente de la junta directiva transitoria de la Comunidad Campesina de San Martín de Sechura.
De igual forma, la empresa indicó que sus operaciones en la región Piura cumplen con todos los requisitos exigidos. “Contamos con todos los permisos ambientales aprobados por las autoridades correspondientes, así como con el derecho de servidumbre otorgado por los propietarios de los predios ubicados en el trazo del gasoducto”, puntualizó.
En abril pasado, Gasnorp inició la etapa temprana para la distribución de gas natural en el departamento de Piura, con las primeras conexiones domiciliarias en las ciudades de Piura, Sullana y Talara. Hoy el servicio público de gas natural beneficia a 3,500 familias en dichas localidades a través de una inversión privada de US$ 100 millones. En el 2022 está planificado conectar a los primeros hogares de Sechura y Paita, y comenzar con la operación comercial de todo el sistema de distribución de la región.