Durante el primer panel del XI Simposium del Agua, titulado “Retos para la gestión integrada de los recursos hídricos en el Perú”, los expertos coincidieron en la urgencia de establecer una nueva estrategia de gestión que permita hacer frente al reto del cambio climático.
“Luego de casi 13 años de vigencia en la ley de Recursos Hídricos, aún hay temas pendientes en su implementación, que requieren trabajo articulado”, afirmó Raúl Jacob, presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), en sus palabras de bienvenida al XI Simposium del Agua, evento que reúne a expertos y analistas para discutir sobre la gestión eficiente del agua frente al reto de la agenda climática.
Jacob recalcó que el Estado debe promover esquemas de alianzas público–privadas para lograr que el modelo de gestión del agua responda a estándares mundiales y trascienda la coyuntura política, incentivando así la eficiencia y la formalidad. De parte del sector productivo minero energético, aseguró que existe un claro compromiso con el uso eficiente del agua. “Estamos convencidos de que solo a través de la suma de esfuerzos con el Estado podremos trazar los objetivos para contribuir con la agenda climática mundial”, aseveró.
Un nuevo plan para la gestión de cuencas
“El Perú enfrenta cada vez sequías más frecuentes, intensas e inesperadas, producto del Fenómeno del Niño. Sin embargo, a diferencia de las inundaciones, el friaje y las heladas, no son consideradas potenciales amenazas nacionales y, por lo tanto, no son consideradas una prioridad nacional”, explicó Mario López, consultor internacional en Gestión de Recursos Hídricos. Por ello, señaló que es urgente una nueva estrategia para fortalecer y consolidar la gestión integrada de recursos.
López refirió que la Ley de Recursos Hídricos estableció la creación de los Consejos de Recursos Hídricos de Cuenca con el objetivo de participar en la planificación, coordinación y concertación del aprovechamiento sostenible de los recursos hídricos en sus respectivos ámbitos, tarea que requiere de compromisos y recursos de todos los agentes involucrados para garantizar un desarrollo sostenible en el mediano y largo plazo.
“Es el complemento fundamental de este trabajo”, indicó López. Además, agregó que “hoy día no existen los 28 Consejos de Recursos Hídricos, solamente hay 14, de los cuales solo 7 tienen planes de gestión y secretarías técnicas. Hay un avance, pero no se ha materializado en resultados”.
López advirtió que “sin un plan de gestión internalizado, articulado, imbuido en sus acciones, los programas institucionales de todos los actores del Consejo de Recursos Hídricos nunca se van a cumplir”. En ese sentido, Jacqueline Villanueva, gerente del sector minero de la SNMPE y moderadora del panel, comentó que el reciente informe de la OCDE sobre Gobernanza del agua en el Perú, alude directamente a los Consejos de Recursos Hídricos de Cuenca.
“Si bien reconocen que es un paso positivo en la implementación de la gestión integrada de los recursos hídricos, es insuficiente, y los planes de gestión de cuenca se implementan y se hacen cumplir de manera deficiente”, aseguró Villanueva. Agregó también que el informe sugiere que existe una sobrerrepresentación de los usuarios agrícolas en estos espacios y que están sujetos a un alto riesgo de capturas políticas, además de contar con escasas herramientas económicas para su funcionamiento.
El fortalecimiento de la ANA
Lissette Vásquez, adjunta del Medio Ambiente, Servicios Públicos y Pueblos de la Defensoría del Pueblo —cuya función es supervisar a las entidades que protegen el derecho humano del acceso al agua—, recordó que el Perú es uno de los países más vulnerables al cambio climático.
“Más de 3 millones de peruanos aún no tienen acceso a agua a través de la red pública”, indicó Vásquez. A su vez, añadió que “según el Sistema Nacional de Información de Obras Públicas (Infobras), existen casi 600 proyectos de saneamiento paralizados, y no existen aún estudios adecuados sobre la calidad de las fuentes de agua, afectando las medidas del Estado para enfrentar la problemática”. Por ello, señaló, es fundamental el fortalecimiento de la Autoridad Nacional del Agua (ANA).
Guido Bocchio, gerente legal y de Recursos Naturales en Southern Perú, dijo que si bien la ANA no tiene capacidad de gasto, sí cuenta con una unidad ejecutora: el proyecto de modernización de gestión de los recursos hídricos, que busca contribuir a una gestión integrada multisectorial y participativa de los recursos hídricos en las cuencas hidrográficas del Perú.
“La ANA está dando cumplimiento al reglamento con la ejecución de este proyecto que asciende a US$ 61 millones”, señaló Bocchio. Este no solo permitirá mejorar la planificación de los recursos, sino también un manejo oportuno de los conflictos. Si bien reconoció que se ha implementado a ritmo lento, señala que aún se está a tiempo para contemplar en el plan los cambios propiciados por la crisis climática.
“Es necesario enfocarse en la tecnificación del riego para mejorar las condiciones de vida de los agricultores. Los gobiernos regionales están llamados a cumplir un rol protagónico en materia agraria y deben impulsar esa tecnificación. Hay mucho canon minero para utilizar. No perdamos de vista el objetivo de la gestión integrada más importante: lograr el desarrollo sostenible del país”, concluyó Bocchio.